El artista puertorriqueño Ricky Martin jamás se imaginó que el disco que nació como “antídoto contra la ansiedad” que le produjo la pandemia le daría tres nominaciones en unos Latin Grammy, que “rescatan la dignidad de la música”.
A través de una videollamada con Efe, desde la sala de su casa que ha acondicionado para el trabajo, Martin reconoció que si bien ya ha recibido otras nominaciones y premios de parte de la Academia de la Música Latina, este año le han sabido particularmente a gloria.
“Se me llena el pecho de orgullo cuando pienso en los artistas con los que estoy nominados. Estoy trabajando entre artistas agresivos con sus proyectos, que no le tienen miedo a experimentar, a crear cosas nuevas. Que se atreven”, indicó el artista que cuenta con 21 nominaciones y cuatro galardones.
Martin recibió tres nominaciones por su disco “Pausa”. “Disco del año” y “Mejor álbum pop” y “Canción del año” por “Tiburones”.
En la primera categoría compite con artistas como J Balvin y Bad Bunny. Por su parte, “Tiburones” se enfrenta a “ADMV” de Maluma, “Bonita” de Juanes y Sebastián Yatra, “El mismo aire” de Camilo, “René” de Residente y “Tusa” de Karol G y Nicky Minaj, entre otras.
“Me encanta además como la Academia está premiando y adaptándose para celebrar a toda esa gente que se ha atrevido a empujar los límites de la música latina. Y eso para mí es arte hecho muy dignamente”, destacó en relación al reconocimiento de artistas del nuevo pop y de géneros como el hip hop y el rap latino.
Para él, esto representa el triunfo de la música por encima de las demandas del mercado. “Es algo que celebro y agradezco, porque además estoy en el mismo proceso desde varios proyectos”.