El musical se vestido de gala para celebrar los 50 años del lanzamiento del «Álbum Blanco» de los Beatles. Una mítica edición que salió al mercado en noviembre de 1968 y que hoy sigue estremeciendo a quienes lo escucharon de siempre y los jóvenes que recién descubren la magia de los chicos de Liverpool.
Perú no ha sido ajeno a este homenaje planetario. «Un día en la vida», una reconocida banda de tributo de los Beatles, que se formó hace 28 años, asumió esa responsabilidad con dos shows que se realizaron el 7 y 8 de diciembre en el Teatro Peruano Japonés en Lima.
El músico y productor Edmundo Delgado, integrante de la banda y gestor del homenaje, declaró para la agencia Andina días antes del show y explicó la trascendencia del «Álbum Blanco» en la evolución musical y, quizá, en el fin de los Beatles.
Con Edmundo, integran este grupo de tributo músicos peruanos tan conocidos como Tavo Castillo (Frágil), Carlos Guerrero (We All Together), Andrés Da Ros (Sangre Púrpura), Johnny Chiappe (El Humo) y los jóvenes Renzo Dalí, Carlo André Oliden, Jeremy Castillo, Alejandro Iturrizaga e Ian Delgado.
–¿Has hecho de la música tu vida?
–Siempre fue mi vida, desde que tengo uso de razón. Soy arquitecto de profesión, pero eso fue como una anécdota, como un hobby para mí. La música es mi pasión.
–¿Llegaste a graduarte como arquitecto?
–Sí. Trabajé 28 días en una oficina y al día 29 salí y nunca más volví. Por supuesto, no cobré. No podía estar encerrado en una oficina haciendo planos cuando el cuerpo y la mente me exigían tocar instrumentos, cantar, componer.
–Ese prejuicio de que no se puede vivir de la música ya se está perdiendo…
–Sí porque realmente los padres de ahora son los hijos que antes teníamos ese problema.
–¿Y cómo nace Un Día en la Vida, la banda de tributo a The Beatles que ya cumple 28 años?
–La idea era homenajear a Lennon tocando la música de Beatles por única vez. Se convocó a músicos vigentes con sus bandas, pues era imposible armar un grupo estable. Resultó siendo un suceso porque nunca se había visto a tanto músico conocido junto. Canal 7 transmitió el concierto y el teatro se ‘recontra’ llenó. Al siguiente año hubo como una nostalgia y lo volvimos a hacer… hasta hoy, pero con otros integrantes.
–¿Cuál es la fórmula para mantenerse por 28 años con este espectáculo?
–De hecho, la música de The Beatles es lo más importante, pero para que un evento sea exitoso durante tantos años no basta con la música. DEA Promotora nos puso músicos sinfónicos e hizo que el espectáculo se elevara. Está también el trabajo de cada músico por sacar en detalle cada tema. Hay detrás un trabajo de preproducción completo que ha revalorizado al espectáculo.
–Este año el tributo a Lennon es con el Álbum Blanco, que cumple 50 años.
–Para nosotros, que somos hinchas de The Beatles, es un gran motivo para tocarlo. Enseñarle a la gente de nuestra ciudad y del extranjero también cómo fue ese álbum y cómo pudo haber sonado en vivo. Quizá sea un poco pretencioso, pero es la meta.
–¿Te consideras un beatlemaniaco más?
–No sé si la palabra beatlemanico sea la adecuada para definirme porque a veces el maníaco lleva a cosas negativas, en todo caso soy un fanático de su música.
–¿Es cierto que el Álbum Blanco es el inicio de la separación de The Beatles?
–Sí y no, porque en el disco se nota una separación musical. Los temas de John son bien Lennon, los temas de Paul son bien McCartney, hablo del gusto musical que tenía cada uno y los temas de George también. En los discos anteriores había una mixtura , acá hay una separación musical. John dijo una vez que este fue el disco del rompimiento.
–¿Qué debemos esperar de esta noche tributo?
–Un disco tocado con la mayoría de los instrumentos que se usaron en las grabaciones originales. Algo curioso es que Renzo Dalí, quien es director de la sinfónica y parte del grupo, tocará alrededor de 20 instrumentos diferentes porque el álbum tiene esa variedad. Mi hijo Ian, quien es el integrante más pequeño, cantará dos temas con la sinfónica. Además, la variedad de las canciones hace que tengamos invitados, uno de ellos es Hugo Salazar, quien no es necesariamente cantante, sino comediante, pero que todo el mundo conoce como un beatlemaniaco. Después de muchos años vuelve Marcelo Motta y vamos a rendirle un homenaje a Gerardo Manuel con unas diapositivas. En su representación, su hijo cantará un tema. (Andina)